09/04/2024 • Lectura de 4 minutos

Cinco pasos para un puesto de trabajo saludable

Cómo configurar un puesto de trabajo ergonómico

por Alex Przybyla

Has adquirido un escritorio ergonómico. ¡Estupendo! Esa es la forma de crear un espacio de trabajo saludable donde te puedas mover más y trabajar bien.

Pero, primero, hay que configurarlo.

A fin de cuentas, el mejor equipamiento no sirve de mucho si no se utiliza correctamente. Te explicamos cómo configurar tu puesto de trabajo y cómo utilizarlo.

Con estos cinco principios, podrás crear una configuración ergonómica rápidamente.

1. Vista

Vas a pasar mucho tiempo delante de la pantalla, especialmente si participas en un buen número de videollamadas. Al igual que la posición de salida de muchos deportistas, tu postura al iniciar la jornada de trabajo prepara el terreno para lo que viene después.

A. Postura centrada.
Asegúrate de no sentarte formando un ángulo. Mantén los hombros paralelos a la pantalla de tu portátil.

B. Distancia.
La pantalla debe estar más o menos a la distancia del brazo.
Consejo: Extiende el brazo y compruébalo. Si el portátil impide que puedas extender completamente el brazo, estás demasiado cerca. Si no llegas a tocarlo, estás demasiado lejos.

C. Altura.
Debes tener la cabeza recta. Con esta posición neutra, se ejerce menos presión en el cuello y la columna vertebral. (Cuanto más se incline la cabeza, más peso ejerce sobre la columna vertebral.)

D. Iluminación.
No deberías tener que hacer un esfuerzo para ver el teclado o tus notas. Asegúrate de que tu superficie de trabajo esté bien iluminada.

2. Distancia para alcanzar las cosas

Aunque pueda parecer que la comodidad debe ser siempre lo primero, a veces, lo más ergonómico de tu puesto de trabajo es el momento en el que te levantas. Si colocas algo que usas con relativa frecuencia a unos cuantos pasos —como un cuaderno, un documento de referencia o una cajita de caramelos— te asegurarás de levantarte y moverte con regularidad a lo largo del día.

A. Priorizar.
Piensa en qué utilizas más: si lo necesitas en todas las llamadas y tareas, déjalo a mano, Pero, si es algo que utilizas con menos frecuencia, plantéate colocarlo a unos pasos.

B. Brazos.
Los brazos deberían caer rectos desde los hombros hacia los codos y estar pegados a los costados.

C. Codos.
Mantén los codos cerca del cuerpo. Deberían formar un ángulo de entre 70 y 120 grados.

D. Muñecas.
Mantén las muñecas rectas al trabajar.

E. Reposabrazos.
Tanto si colocas los brazos en los reposabrazos de tu silla como sobre la mesa, no deberías tener que inclinarte a un lado ni levantar los hombros.

3. Postura al sentarte

Se necesitan dos personas para bailar un tango y, en términos ergonómicos, en tu puesto de trabajo tu pareja de baile es tu silla. Una silla ergonómica te permitirá personalizar tu nivel de confort y sacarle el máximo partido a tu puesto de trabajo. Obtén más información sobre cómo las sillas de Haworth proporcionan soporte a la columna vertebral.  

A. Ajuste.
Asegúrate de que tu silla se ajuste a tu cuerpo.
a.     Consejo: si utilizas una silla de Haworth, consulta el vídeo sobre los ajustes en la página del producto. Por ejemplo, puedes ver el de la silla Zody aquí.

B. Tronco.
Cuando te sientes, asegúrate de que el ángulo entre el tronco y los muslos sea de 90 grados o más.

C. Reposabrazos.
Los reposabrazos no deberían impedirte acercarte a la superficie de trabajo, así que ajusta la altura si es necesario.

D. Piernas. Debería haber espacio entre la parte inferior de la mesa y la parte superior de las piernas.

E. Pies. Mantenlos completamente apoyados en el suelo o en un reposapiés (de manera que tengas amplio espacio para mover los pies al ritmo de la música que escuches).

4. Estar de pie

Estar sentado durante todo el día no es lo mejor para tu cuerpo. En una configuración ergonómica ideal en el puesto de trabajo, se puede regular la altura, lo que te permite trabajar también de pie.

A. Mesa alta.
Si la altura de tu mesa se puede ajustar, estupendo. Si no, plantéate añadir un accesorio ajustable a la mesa o ubicar una mesa alta cerca.

B. Duración.
Al principio, prueba a ir sumando 15 minutos. Posiblemente seas capaz de estar de pie durante más tiempo conforme te vayas acostumbrando.

C. En movimiento.
No te quedes completamente parado. Mantente en movimiento. Cambia de postura, balancéate un poco y mantente activo.

D. Libertad de movimiento.
Asegúrate de que no haya nada por tus pies con lo que puedas tropezar, como el cable de un cargador o la pata de la silla.

5. Postura al apoyarte en la silla

Si cuentas con un puesto de trabajo de altura ajustable, el mejor compañero de baile es una silla que te permita apoyarte en ella, por ejemplo, los modelos Zody II y Zody LX, que te permiten sentarte en dos posturas distintas.

Apoyarse en una silla combina lo mejor de sentarse y estar de pie. Añade una postura más a tu variedad de opciones, donde la mejor postura es la siguiente.

Las prácticas recomendadas cuando te apoyas en una silla son similares a cuando te sientas o estás de pie.

A. Bloqueo.
Asegúrate de bloquear las ruedas de la silla. Es muy importante que recuerdes este detalle, especialmente si no estás acostumbrado a esta postura.

B. Tronco.
Mantén un ángulo de 90 grados o más entre el tronco y los muslos.

C. Reposabrazos.
Debes poder acceder sin problema a la superficie de trabajo.

D. Libertad de movimiento.
Asegúrate de que no haya nada por tus pies con lo que puedas tropezar, como el cable de un cargador o la pata de la silla.

E. Pies.
Mantenlos completamente apoyados en el suelo o en un reposapiés

¡Una charla sobre ergonomía mientras estás de campamento!

Recientemente, el equipo de Haworth asistió al campamento “Chair Camp”, donde se aborda de forma divertida todo lo que Haworth tiene entre manos. Obtén más información sobre ergonomía en esta charla entre Manuel y Fabiola.

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